Hago pública esta misiva Aún no habéis tenido la decencia de responder a mi anterior misiva, pidiendo vuestro precio por liberar a cuantos prisioneros habéis hecho en la batalla y saqueo de Islabella.
Poco sé de vos, más allá de que atacáis a los que son débiles y prácticamente inermes, os vanagloriáis de ser fuerte y os escondéis en las ruinas que habéis creado a partir de una comunidad floreciente. No sois ni conquistador, ni guerrero, ni hombre.
Despreciáis el valor de quienes claramente han demostrado ser mejores y más valientes que vos y los vuestros. Los dos sabemos que no tengo capacidad de ir de nuevo por vos. Ya habéis demostrado que 5 de vuestros barcos son mas de los que cada uno mío puede vencer. Enhorabuena.
Lástima que vuestros vasallos sean tan cobardes como vos y se conformen con masacrar gente inocente, porque si tuvierais alguna traza de valor, vendríais donde sabéis que os daremos batalla. Os deseo que os pudráis en el infierno, cobarde, rata de cloaca, saco de pústulas, pajillero malparido.
El difunto Lord Farman y sus hombres, mi hermano, Adrian Tarbeck, Lord Jon Farman os han enseñado sobre el valor Occidental. A ver si tenéis vos valor a su altura y venís a donde podamos medirnos de tu a tu.
Tengo enemigos más poderosos con los que pelear, ya os he vencido, y aunque mis hombres deseen devastar vuestras tierras creo que mi deber es destruir a aquel que se sienta en el Trono de Hierro y llevar un camino sangriento hasta él. No quiero que ataquéis mi retaguardia mientras navego al sur y al oeste, por ello no sé si devolveros los encantadores rehenes que hice tras vuestra derrota. No sois fuerte en el mar, Lord Jason y de vuestras tierras solo ansío la riqueza y el fruto de las cosechas. Si queréis volver a ver a los vuestros y que no sean rehenes para asegurar vuestro buen comportamiento deseo:
-Que entreguéis vuestra flota y prometáis no atacar ninguna Isla del Mar del Ocaso, a cambio cesaré mis ataques sobre occidente. Esto es, reconocer al Lord Segador como Guardián del Mar del Ocaso.
-Entregadme suficiente grano y oro para satisfacer lo que mis hombres perderán por no atacar vuestras tierras.
No tenéis ni el valor ni la capacidad de hacer una mierda más allá de lo que ya habéis hecho, atacar al pequeño siendo vos el grande. La masa bruta de vuestros esbirros contra unos pocos defensores en un castillo.
Quiero a Ser Adrián con todo mi corazón y me duele su ausencia, me duele lo que seguramente una rata inmunda como vos seguramente le hará. La perdida de las vidas de la hija mayor del difunto Lord Farman y todos los otros que pueden estar en vuestras garras y yo no conozca de nombre, pesarán sobre mi conciencia hasta que muera. Pero si creéis que voy a despreciar su sacrificio pagandoos para que dejéis las costas de Occidente, sois aún más estúpido de lo que pensaba.
La única manera de que Occidente perdone la masacre de Islabella será después de que vuestra sangre deje de animar vuestro cuerpo y vuestra flota sea destruida. ¿Queréis ir contra el rey? ¿Que rey es enemigo vuestro?
Ni Aegon ni Rhaenyra perdonarán vuestras correrías, pues de Islabella a Desembarco del Rey encontraréis que se unirán contra vos independientemente de a qué rey le deban lealtad.
A los calificativos anteriores, añadiré que sois un infraser, solo se os llama Lord porque a nadie se le ocurrió llamaros Rata sarnosa Dalton Greyjoy. Sois además de un cobarde un tonto a a las 3, y a todas horas del día. Solo vivís para que la gente de bien le ponga nombre al monstruo que viene del mar a robar y violar.
Por si no habéis entendido ni mi tono ni mis palabras. Os hablaré despacio y con letra más gorda. Usaré palabras fáciles para que podáis entenderlas.
PODEIS VENIR A POR MIS BARCOS CUANDO QUERAIS
Y podéis chuparme el culo cuando queráis, pero avisadme, no me lavaré, seguro que así será más de vuestro agrado.