Mi señor, acabamos de recibir la visita de una mujer, una jinete de dragón que se ha identificado como Visenya Targaryen. Ha atacado nuestro castillo y ha exigido nuestra lealtad para con la casa Targaryen.
Ante nuestra negativa la reunión ha terminado con insultos por su parte, a los que nos hemos defendido de la misma manera. Lamentamos no haberla podido apresar en vuestro nombre, pues el encuentro se ha realizado fuera de nuestra fortaleza.
Lord Mallister nos ha invitado a su castillo. El mensaje era escueto, para « tratar asuntos » era la única justificación. Cuando recibáis este mensaje estaré de camino al encuentro, pero sabed que defenderé vuestros intereses.
Atrinchérese y convoque a sus hombres. Enviaremos socorro pronto. Se dice que Aegon solo tiene 4.000 hombres, que están en Valle Oscuro. Acudiremos con un ejército y aplastaremos a ese rubito advenedizo.
Harren I Hoare, rey de los Ríos y de las Islas.
A Lord Goodbrook,
Confío en vuestra lealtad. Enviaré una misiva a Lord Mallister para que convoque a sus tropas. Haga usted lo mismo cuando regrese a su castillo.
Escribo estas líneas deprisa pues el enemigo está entrando en mi castillo. Una mujer llamada Rhaenys Targaryen ha llegado aquí con la intención de negocia mi traición hacia vos, algo que, por supuesto, está totalmente descartado. Ha venido montada en una gran vestia alada, un dragón escupefuego. La entretendré todo lo que pueda, pero le he ofrecido el pan y la sal por lo que no puedo hacerle daño por mi mismo.
Una multitud (varios miles) se está congregando frente a Harrenhal junto a los estandartes de Targaryen están los que lo acompañaban en los Feudos y aquellos que huyeron en la batalla de Valleoscuro.