Wyl de Wyl tenía la mirada perdida en el horizonte, allí donde el mar y el cielo se juntaban en su eterno beso. Su hijo se acercó por detrás, aunque él le había oído llegar.
—¿Me habéis hecho llamar, padre?
Wyl no se giró.
—Hemos recibido órdenes de Dorne. Son sencillas. Hay que reclutar un espía y mandarlo a reunir toda la información posible sobre Refugio Negro.
—¿Y qué haréis, padre?
Wyl de Wyl sacudió la cabeza.
—¡Obedecer, maldita sea! Dorne son nuestros señores. Les juramos y debemos lealtad. Mandaremos a sir Henry a Wyl para que busque al hombre adecuado para este trabajo. La guerra que se avecina puede ser una gran oportunidad para nuestra casa. A veces, servir es el único camino para ascender.
El viento soplaba desde el mar, llevando el aroma de la sal y el susurro de las almas de tantos hombres que habían dejado la vida en sus aguas. Wyl de Wyl echó a andar hacia el castillo, con su hijo a su espalda, sumido en un servil silencio.
POV: Henry Koylanhaad
TOKEN: El impuesto al señor.
Wyl no es un gran puerto pesquero, tampoco tiene grandísimas ganaderías y las tierras no acompañan para la cosecha, pero sus gentes siempre han salido adelante, son capaces de adaptar todo lo que tienen para salir adelante y hacer de Wyl una fortaleza envidiable en Dorne, lo que hace que esto repercuta en su economía con los impuestos a sus gentes.
MISIÓN: Henry Koylanhaad buscará en Wyl al mejor espía disponible para enviarlo a recabar información a Refugio Negro.