POV: Quellon Greyjoy
Tokens: Aeron Piesmojados, El kraken de Ébano
Misión: Asistir al muchacho con las habilidades sanadoras de Aeron e intentar que despierte para interrogarle y averiguar que sabe.
Roleo:
Quellon hizo llamar a Aeron Piesmojados con urgencia. Llevaba ya muchos días dándole vueltas a lo ocurrido. Tenía que averiguar que se cocía en las Islas, y ponerle solución. Lo primero era averiguar que sabía aquel muchacho que había llegado inconsciente y malherido. Quellon contaba con las artes y la habilidad de Aeron. Si, Aeron conseguiría despertarlo.
Llamaron a la puerta. Y con el permiso del Señor de Pyke, el sacerdote del dios ahogado entró en la habitación. La preocupación se hacía notar en su rostro, el echo de que algunos sacerdotes del dios ahogado parecían implicados en lo ocurrido no podía traer nada bueno.
Quellon se levantó de la silla, miró fijamente a Aeron y le dijo:
– No dudo de tu lealtad, pero tenemos que averiguar que ha ocurrido. Y si hay sacerdotes del dios ahogado realmente implicados, habrá que actuar en consecuencia. Ahora acompáñame, hay un muchacho al que sanar. Tenemos que averiguar todo lo que sepa.
Aeron asintió firmemente y sin mediar palabra siguió a Quellon hasta aquel lugar donde tenían al chico a buen recaudo. Siguiéndoles como una sombra aquel gigante de ébano, aquellos días guardaespaldas a tiempo completo de Quellon.
Objetivo: Salvar al muchacho y averiguar que ha ocurrido.
Tras una semana y media el chico continuaba en coma. Aeron Piesmojados comenzó su ritual matutino, durante todo este tiempo había sido el encargado de mantener en vida a aquel muchacho. Su cuerpo se debilitaba cada día más, apenas podía ya tragar el triturado de algas con el que lo había estado alimentando. No pasaría de esta noche si continuaba dormido. El sacerdote del Dios Ahogado se colocó la vieja toga verde que siempre utilizaba en sus rituales, y guardó en su bolsillo un pequeño saco de piel de foca lleno de sal negra. Después se dispuso a cargar al chico en la espalda. Pese a la avanzada edad de Aeron, reconocido como el hombre más longevo de la isla, no le supuso ningún problema cargar con él. Entre dos altos peñascos se abría el camino que los llevaría hasta la costa. El sacerdote no paró en ningún momento, ni siquiera al llegar a la orilla, continuó avanzando hasta que el agua le llegó al pecho. En ese momento dejo caer el peso, el chico se deslizó por su espalda hasta llegar al agua, hundiéndose unos instantes antes de salir a flote. A pesar de que había amanecido hacía ya un par de horas, Pyke se mantenía oscuro bajo un extenso manto de negras nubes. Aeron levantó sus manos y un rayo cayó a sus espaldas, desatando la lluvia que las nubes parecían haber estado reservando para él. Era el momento, su Dios estaba observándolo, de eso estaba seguro. Abrió la boca del chico y dejó caer en ella el puñado de sal negra. Tras cerrarla de nuevo, deslizó la mano hasta la frente del muchacho y comenzó a presionar, hundiéndolo poco a poco en el agua.
El chico parecía igualmente muerto y Piesmojados dejó ir el cuerpo. Al fin y al cabo pasaría lo que el Dios Ahogado quisiese. El cuerpo del chico comenzó a caer pesadamente cuando, de pronto, los brazos de éste salieron a la superficie, tratando de asirse al aire. Lo que encontró fue los brazos del sacerdote, al cual se aferró como si no hubiese un mañana. El chico había despertado.
Descripción: Aeron Piesmojados llevará al chico reanimado ante su señor Quellon Greyjoy. Se le ofrecerá al chico comida y bebida antes de asaltarlo con preguntas, aunque siempre irá acompañado por si decide contar algo sobre lo sucedido. Cuando se haya recuperado lo suficiente. Quellon le interrogará de forma muy amistosa para averiguar que pasó con la embarcación de Antigua. Quienes fueron los atacantes, si fueron isleños o no, si llegó a reconocer a algún hombre o emblema.
Objetivo: Averiguar que pasó con la embarcación donde venía el chico y los maestres.
/// No se si tengo que hacer misión de esto o simplemente escribir lo que quiero hacer con el chico después de despertarse pero bueno lo pongo como misión y tu ya consideras si hace falta lanzar dados o no XD
El chico canta. Les atacaron, barcoluengos, con velas negras completamente. No sabría distinguir nada, exceptuando una falange huesuda. Es lo único que recuerda, lo único aparte de la matanza, de sus compañeros muriendo a mano de hombres que, claramente, eran marinos.