Sólo una retorcida mente de vejestorio Targaryen podía ingeniar algo como aquello. A Cersei no le extrañaba que a Maegor I le llamasen el Cruel viendo aquel pozo oscuro, frío y terriblemente desolador que conformaban lo que se llamaba las Celdas Negras, lo más profundo de los sótanos de la Fortaleza Roja, compuesto por minúsculos cubículos donde no entraba la luz y donde difícilmente un adulto podía tumbarse. No quería ni pensar en qué ocurría con los excrementos o qué pasaba cuando un preso simplemente permanecía…demasiado tiempo allí.
La puerta de la celda de Lord Eddard Stark no era diferente a las demás. Al abrirse la pequeña poterna, el carcelero tuvo que acercar el farol para que algo de luz se colase dentro de la pequeña estancia y la Reina Regente viene al hombre que hasta hace poco era el menos apestoso de los norteños. Por el aire pesado que emanaba desde la portena, es probable que ahora fuese uno de los más apestosos entre los sureños.
— ¿Quién es? — preguntó Ned, mientras trataba de ocultar sus pupilas ahora poco acostumbradas a la luz.
— Querido, tu hijo quiere jugar al juego de tronos y me preocupa que no sepa hacerlo. — Cersei extendió la carta que había enviado el joven Stark por cuervo con sus juveniles exigencias, de su puño y letra y perfectamente lacrada con los símbolos de Invernalia. — Será mejor que entre ambos tratemos de aclararle algunas cosas…
PoV
Cersei Lannister
TBC
Tokens
La familia Stark viaja al Sur
Lord Eddard, sus hijas Sansa y Arya y hasta su espada Hielo viven ahora bajo la “protección” de la Reina Regente en la Fortaleza Roja. Muy lejos de Invernalia, demasiado lejos del Norte…
Ejércitos
N/A
Objetivo
Quiero que Ned, un Lord y hombre cabal, envíe una carta a Robb tratando de hacerle entrar en razón. De su puño y letra.
Misión
No espero sacar gran cosa en el macrogame de esta misión porque el jugador Stark va a hacer lo que le plazca, como es natural, pero me gustaría sabes qué habría pensado Ned de que Robb hablase así. No de que hable de un complot, que el propio Ned lo pensaría a esas alturas, sino de lanzarse a la guerra tal a la ligera y con su padre y sus dos hermanas prisioneras en la Fortaleza Roja (o custodiadas).
En todo caso, la guerra no es el único camino y aunque el joven Robb no haga caso, las últimas palabras de Ned en el Norte quizás siembren una semilla entre los que las escuchen, como sus banderizos, difíciles de olvidar…
El cuervo recibido:
La casa Stark exige explicaciones inmediatas sobre el arresto de Lord Eddard Stark, su puesta en libertad, y garantías de la seguridad de Lady Sansa y Lady Arya. El silencio o la vacilación se tomarán como una admisión tácita de que tales hechos constituyen un siniestro complot en contra de nuestra casa y del reino.
Robb Stark