PoV: Marq Grafton
Tokens:
Marq Grafton (Es el almirante de la flota, por lo que tiene conocimientos marinos, además de ser una personalidad del Valle)
Raymond Hunter (Diplomático de la Reina Madre, Sharra Arryn, por lo que puede hablar en su nombre)
Impuestos del Valle (En caso de necesitarlo, utilizar uno de los puntos de los Impuestos del Valle para contratarlos)
Objetivo: Conseguir el apoyo de alguna flota mercenaria, con interés en las flota bravoosies, que tienen fama de ser las mejores naves de Essos.
Procedimiento: Marq buscará la ayuda de alguna flota de Essos, con el apoyo del Señor del Mar. Como tenemos sospechas de la gente de Tres Hermanas, si las conquistamos esa zona quedará libre, por lo que se deslizará la posibilidad de convertir a tales almirantes en señores de tierras en las Islas, una manera de convencerles y de rebajar el precio todo lo posible.
Rol:
- El Valle del Arryn.- Marq se había reunido en la Casa del Jade con aquel hombre de Braavos. Se llamaba Giuly Otherys, proveniente de una familia de Lorath, aunque su familia llevase mucho tiempo dispuesta en Braavos. Se había interesado por su apellido y al parecer habían sido piratas, antaño, que ahora vivían bajo la protección de la ciudad. Al menos sabrían lo que se hacía.- Es hasta allí a donde deberíais ir para servir a la Reina Madre, Sharra Arryn.
El Palacio de Jade era fiel a su nombre, pues muchos de sus muros eran de piedra negra, brillante, provocando que muchos de los que entraban por primera vez quedasen obnubilados. Y así había sido para Marq, el cual visitaba por primera vez muchos de los recovecos de Braavos.
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La Reina Madre está dispuesta a recompensaros según la valía que mostréis en sus tierras, de manera muy beneficiosa para vos.- Hunter se había animado a hablar, más ducho en la parte de negociación.- Pero necesitamos a buenos marineros y a barcos capaces de plantar batalla ante todo.- Incluso con el título de Señor.- Ambos hombres del Valle sabían que las gentes de las Tres Hermanas tenían un desafío hacia los Arryn…y quizás era hora de posicionar a gente más capaz en esas islas que siempre resultaban revoltosas.
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Una guerra siempre es una oportunidad, Otherys…y aquí está la vuestra.