POV: Roland Connington
Tokens: Roland Connington, La caballería del grifo
Roleo:
Atrás quedaban los muros de Nido del Grifo. Dorian, el Maestre, observaba junto con la guarnición la partida de los soldados y alzaba una mano en señal de despedida a uno de sus protegidos. Luego, se desvanecía entre las banderas, las cotas de malla y el piafar de los caballos. La Casa Connington partía a la guerra.
Dos cuervos habían llegado al castillo en los últimos días. El primero, de su primo. Un cuervo de Lord Jon, desde El Cántaro, conminando a Roland a mantener las defensas preparadas y dar apoyo a Rhaegar cuando desembarcara en las Tormentas, hacia el Norte. El segundo, de Lord Robert Baratheon, su legítimo señor feudal, diciéndole que preparara a los hombres para marchar a Bosqueumbrío.
Una decisión que había partido su alma. Su lealtad a su familia, a su reino y a su señor. Todo había colapsado en la misma dimensión. EN el mismo momento en que alzó los dos pergaminos y llamó al Maestre Dorian. Él había sido el que había tomado la decisión. En él había confiado para poner el futuro de su casa en juego.
Hacia el norte marchaban. Hacia el norte con unos cuantos mercenarios reclutados y la gloriosa caballería de los Connington. Evitarían las cercanías de Bastión de Tormentas y marcharían hacia Los Pergaminos y las cercanías de Horcagrís, donde Rhaegar habría de desembarcar. Allí…cercarían a Robert Baratheon.
A Roland, Robert le gustaba tan poco como a Jon. Pero no dejaba de ser su señor. Y un loco peligroso con un enorme martillo. Si fracasaban…si aquello salía mal, ¿qué se haría de su Casa?
Prefería no pensar en ello. Centrarse en la misión. Roland Connington no era su primo, no tenía tanta destreza en las justas ni en las armas, pero sí en la astucia y en el arte de lo sibilino. Un caballero no era más que una espada con cintas y un caballo valioso. Si había que atacar por sorpresa, lo haría. Y Robert Baratheon caería.
Misión:
Acudir al norte a reunirnos con las fuerzas leales que se supone deberían desembarcar por la zona de Los Pergaminos. No quiero una marcha forzada para evitar emboscadas (de ahí caminar normal y desplegar exploradores). Para distraer la atención de Robert, enviamos una pequeña compañía (no la considero ni ejército, simplemente unos cuantos hombres) con banderas de Connington hacia el sur, hacia la zona de Bosqueumbrío, de tal manera que, si vigilan el castillo, al menos haya una pequeña distracción o confusión en las noticias que lleguen.
He elegido un camino alejado de Bastión de Tormentas y de otros castillos para preservar el factor sorpresa y poder golpear por la espalda a las fuerzas de Baratheon.
Movimiento:
Aquí va el mapa
Me dice Valar Tools que marchando normal son 36 horillas para esos 3 hexágonos. Por tanto, llegaría el miércoles tarde/hora de comer, aproximadamente. Cualquier cosa dime.
Objetivo:
Asegurar Los Pergaminos y golpear al ejército de Robert para inflingirle una herida mortal y ganar ventaja en la Tormenta.