Misión 14. Sueños del pasado

PoV

Elmo Tully

Nieto de Grover Tully y heredero de Aguasdulces. Elmo esta más inclinado a apoyar a los Negros pues cree que Rhaenyra tiene razón, pero no piensa tomar partido fácilmente, la enfermedad de su abuelo lo ata ya que este apoya a Aegon. Es un aclamado caballero que ha tenido celebres participaciones en diversos torneos y como comandante es respetado y se le cree capaz. Además dado que hace tiempo que regenta el poder de Aguasdulces se ha ganado el aprecio de la mayoría de señores de los ríos pues es un hombre pragmático y decidido en el día a día. Quizás su mayor debilidad sea su falta de experiencia en asuntos de gran importancia y su nulo conocimiento del funcionamiento de la corte, es un hombre de provincias podría decirse. Está casado con Lady Jeyne Vance, hija del señor de Atranta. Tiene además de Kermit y Óscar (10) dos hijas con ella, Julia(7) y Abby(6) y dos gemelos Bert(3) y Ernie(3).

Tokens

Ser Elmo Tully

Heredero de Aguasdulces, regente por fuerza mayor por la enfermedad de su abuelo, él gobierna las tierras de los ríos. Ha sabido hacer amigos entre sus vasallos y afianzar sólidos lazos de lealtad con ellos. Es un general y caballero notable pero le falta ambición política. Suele tomar las decisiones más pragmáticas y beneficiosas para los suyos.

Cazadores ribereños

Las tierras de los ríos son ricas en caza y la mayoría de los hombres saben usar un arco con soltura. Algunos de estos arqueros, famosos por ganar competencias o con renombre entre los cazadores del Tridente han acabado sirviendo a Aguasdulces por un motivo u otro. Ahora sirven como cuerpo especial de exploradores para la casa de la trucha, nadie conoce el Tridente como ellos.

Ejércitos

No hay

Objetivo

Crear el token “Martillo de Justicia” encontrando el arma legendaria de Tristifer IV Mudd

Misión

Viajar hasta Piedrasviejas para, con los rastreadores encontrar la antigua cripta donde descansan los restos mortales del héroe ribereño Tristifer IV Mudd. Buscar allí su martillo y hacer a Elmo su portador como “elegido” del difunto rey para defender los ríos en los conflictos que están por empezar.

Localización

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Desde Aguasdulces hasta Piedrasviejas
Un pequeño grupo necesita un día para ir desde Aguasdulces hasta Piedrasviejas

  • 4 hexágonos de difícil (bosque, colinas, pantano …), a marcha normal, cruzando un río, en 30 horas

Roleo

Elmo abrió los ojos de repente. Estaba rodeado por una espesa niebla que impedía que pudiese ver a más de una decena de pasos. Al momento, mientras miraba a su alrededor totalmente desorientado de entre la bruma llegó un hombre caminando, tranquilo. En su diestra y descansando en su hombro derecho había un martillo de guerra con runas grabadas en toda su superficie. Una cara era plana, la otra acababa en pico.

Por fin llegas Tully, te esperaba- dijo el hombre mientras se acercaba, señalando tras Elmo. De entre la bruma aparecían más figuras, distintas en este caso pues no eran sino siluetas, sombras con ojos y lanzas, hachas y espadas que los amenazaban. Elmo quiso contarlos pero eran demasiados, quizás un centenar, pero el del martillo parecía no tener miedo y empezó a reír a carcajadas mientras los llamaba.

Buscame, encuentra mi tumba y porta mi martillo. Defiende a los nuestros - le dijo blandiendo el arma contra las primeras sombras, haciéndolas desaparecer sin demasiado esfuerzo, pero eran más muchas más. -¡Vamos vete! - dijo el portador del martillo empujando a Elmo hacía atrás, despertando acto seguido en su despacho de Aguasdulces. En la mesa, un libro abierto que había estado ojeando “Las grandes batallas de los ríos” abierto en el capítulo dedicado a un hombre, Tristifer IV Mudd.

Marcháis hasta Piedrasviejas sin mayoras problemas que la incesante lluvia y el barro. Ascendéis la colina hasta adentraros en las ruinas y allí encontráis el sepulcro de Tristifer IV el Martillo de la Justicia.

No sin cierta congoja en el corazón rompéis los sellos y cuando se disipa el polvo comprendéis lo futil de vuestra misión, nada más que polvo queda en la tumba, si allí estuvo realmente enterrado el rey Tristifer IV hace mucho que o los elementos o los saqueadores limpiaron la tumba.

Pero no todo está perdido, os decís, al fin y al cabo es tan solo un martillo, un símbolo, algo que una a los rios bajo el mando de Elmo, solo necesitáis decir que lo habéis encontrado. Mientras debatís el qué hacer el sonido de los caballos os sorprende, cuando os queréis dar cuanta unos 30 caballeros y otros tantos arqueros os rodean y pronto os veis desarmados e interrogados.

Los ruegos de Ser Elmo acerca de su alcurnia no son escuchados hasta que el señor de aquellos hombres hace acto de presencia. Ser Aeron Nayland es caballero sólo de título, sus armas son viejas y su caballo un simple palafrén. Su llegada tranquiliza las cosas cuando reconoce a Ser Elmo como el heredero de Aguasdulces, pero sus palabras son duras, no gustan de haberos encontrado en Piedrasviejas actuando de manera furtiva.

Os llevan a Pantano de la Bruja donde quedáis como “invitados”, Lord Howland Nayland, pese a la pobreza de su casa, es muy buen anfitrion y sabe tratar como es debido a Ser Elmo, peor no cabe duda que sois prisioneros. Ser Elmo habla de la caravana que deberia llegar a Pantano de la Bruja desde Aguasdulces mañana mismo y Lord Howland da por cerrado el asunto hasta que esos “regalos” lleguen.

Estos tokens quedan retrasados hasta que se resuelve la misión 17. Lord Nayland está MUY enfadado de que hayáis entrado en sus tierras sin pedir permiso previo y desacrado la tumba de Tristifer IV y las ruinas de Piedrasviejas.