Misión 19: Vuelta a Casa (A salvo)

[Petyr]

PoV: Brynden Tully

Token: El Pez Negro

Ejército: Ejército del Pez Negro + Caballeros de los dos ejércitos Tully en Aguasdulces

Misión: Como el ejército Lannister persigue a Edmure, la idea es salir en tromba con los caballeros de Arryn y hacer una carga a la vanguardia de los ejércitos Lannister (Si van en Marchas Forzadas, deberíamos cogerles sin defensa). La idea es arrasar a la vanguardia y dar tiempo a que todos entren en Aguasdulces con tranquilidad.

Rol:

Brynden Tully, conocido como el Pez Negro, cabalgaba al frente de los caballeros del Valle del Arryn y de Aguasdulces. La noticia de la rápida marcha de las fuerzas Lannister había llegado a sus oídos, y sabía que su sobrino, Edmure Tully, necesitaba tiempo para fortificar Aguasdulces y prepararse para el inminente asedio.

Con el estandarte de la trucha plateada ondeando en lo alto, Brynden dirigió a sus hombres con determinación hacia el lugar donde se encontraba la vanguardia enemiga. Los bosques resonaban con el sonido de los cascos y el crujir de las ramas.

Al llegar al borde de un claro, Brynden se detuvo y alzó su voz, llamando la atención de sus tropas. Los caballeros del Valle y los hombres de Aguasdulces se agruparon en torno a él, atentos a sus palabras.

“Hermanos”, comenzó Brynden con voz firme. “Hoy nos enfrentamos a un enemigo poderoso, pero no venimos aquí para temer. Venimos aquí para dar a nuestro señor, Edmure Tully, el tiempo que necesita para defender nuestro hogar”.

Los caballeros escucharon en silencio, inspirados por la determinación de su líder.

“Bajo este estandarte, somos uno. Por Aguasdulces, por el río que corre junto a nuestras tierras, por el honor de nuestra casa, ¡avanzaremos!”

Con un grito unificado, los caballeros y soldados cargaron contra la vanguardia Lannister.

[Kevan]

Cuando Ser Edmure supo de la cercanía de los hombres de Lannister, su gesto mutó. Sin embargo, no hubo espacio para la incertidumbre o las dudas. Sin perder la calma. Edmure “el sombrío” como había comenzado a ser llamado, aprovechó la cercanía de Descanso del Caminante para enviar un cuervo a Aguasdulces para recibir el auxilio de su tío Brynden y las tropas del Valle.

Al mismo tiempo, el heredero del Tridente ordenó a sus hombres avanzar a marchas forzadas, mientras encomendaba a uno de sus más leales amigos la misión de retrasar a los Lannister que tras de ellos avanzaban.

Y ahí comenzó una persecución frenética en la que los ribereños recorrían la distancia que los separaba de Aguasdulces… mientras los occidentales, con sus 4.000 jinetes al mando de Ser Addam Marbrand, reducían la distancia que los sepraban.

Porque evitar aquella batalla no era algo que dependiera enteramente de ellos. De haber mantenido los Lannister la formación, sin duda los ribereños hubieran escapado, pues su conocimiento de aquellas tierras les permitía no sólo mantener la distancia, sino también ampliarla. Sin embargo, por mucho que un soldado conociera aquel reino plagado de riachuelos, un caballo al galope era mucho más rápido.

Y así fue como a medio camino entre Aguasdulces y Descanso del Caminante, la caballería Lannister alcanzó al ejército de Ser Patrek Mallister, quien con bravura e ingenio, obligó a la caballería Marbrand a reducir el galope desbocado al conducirlos a un pequeño río cuyo paso ralentizó al ejército. Sin embargo, el precio a pagar por la seguridad del resto de hombres tuvo un alto coste.

Ser Addam Marbrand, un avezado jinete, no tardó en centrar sus esfuerzos en el enemigo que les había jugado aquella estratagema. Fue el primero en saber que no alcanzarían al resto del ejército, por lo que centró sus esfuerzos en aquel ejército, aniquilándolos por completo y haciendo cautivo a su líder.

Y ahí, mirando cómo las huestes Tully marchaban, un millar de caballeros Arryn se dispuso frente a los cuatro millares de jinetes occidentales, lo que dibujó una media sonrisa en las facciones del Marbrand. Sin embargo, sabedores de que el ejército Tully estaba a salvo, la caballería Arryn no presentó batalla.