PoV
Wylla de Wyl
Tokens
Wylla de Wyl
La comandante de la misión. Tiene muy claro lo que deben hacer y qué quiere conseguir con ello.
El honor está sobrevalorado
Lo que se va a hacer es, cuanto menos, poco ético.
Peajes de las marcas
El poderoso caballero abre más puertas que un ariete.
Ejércitos
No procede. En caso de emplearse soldados para la segunda parte sería un grupo reducido, no un ejército entero.
Objetivo
Quiero provocar un ataque por parte de los Dondarrion. Sobornar/engañar a un oficial, no tiene ni que ser un noble, para que guíe a sus hombres a un saqueo, en teoría, por orden de Lord Dondarrion. Dicho saqueo será una trampa y el oficial morirá en la emboscada de manera que los cautivos puedan testificar sin mentir que el oficial aseguraba tener órdenes de su señor.
Misión
Se ofrecerá un soborno a un oficial de frontera para que ataque una supuesta caravana en tierras dornienses con el pretexto de recuperar algo valioso para quien lo contrata. Llevará a sus hombres a una emboscada y los supervivientes serán capturados para ser interrogados.
Localización
La primera parte (soborno) se llevará a cabo en cualquier villa fronteriza entre La Tormenta y Dorne. La segunda parte (emboscada) será ya en tierras dornienses, posiblemente en las montañas.
Según la calculadora de viaje, 6 horas. Pero, vamos, que sean las que hagan falta.
Roleo
— Asegúrate— dijo Wylla al encapuchado.— Es importante que el oficial muerda el anzuelo.
— Ya me conocéis, mi señora— respondió el otro. — Convencería a la propia Rhaenyra de que me chupase la polla y, que además, me nombrase señor de algún castillo pequeño.
— Como tu polla— dijo otro de los hombres arrancando carcajadas a resto.
— ¡Basta!— Corto Wylla mientras le asomaba una sonrisa.— Los demás preparad la caravana, debemos estar en el punto de la emboscada cuando se acerquen. Su codicia debe ser mayor que su prudencia.
El encapuchado, uno de los mayores charlatanes al servicio de los Wyll se acercó a la posada donde sabía que los soldados bebían tras el servicio. Allí encontraría a algún oficial y sus promesas de riqueza lo animarían a… obrar por iniciativa propia.