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Lord Borros Baratheon
Lord Borros Baratheon
Lord Borros es un hombre de gran presencia. Físicamente robusto, encarnaba la fuerza y la tenacidad características de su casa, con una voz profunda y autoritaria. Su personalidad está marcada por una mezcla de pragmatismo y orgullo, tiene una visión clara de su estatus y de lo que significaba ser un Baratheon, la lealtad a su casa y la defensa de su dominio son primordiales.
A pesar de su fuerte carácter, Borros es hombre fácil de leer y poco dado a las intrigas, aunque se desenvuelve a la perfección en la política del reino pese a ser analfabeto. Leal a los que considera sus aliados, no perdona fácilmente los desaires.
Está cerquita, coordinando la movida, pero físicamente en el el vado cuidando de su ejército.
Tokens
Familia Caron
El suegro de Lord Borros, Lord Royce Caron, es su consejero más cercano, veterano de la Carnicería Myriense, es uno de los señores más curtidos en batalla, siempre que cabalga lo hace junto a su hijo, Ser Desmond, candidato a la Guardia Real rechazado por Rhaenyra. Elenda Caron, por su parte, no profesa demasiado cariño por su marido pero defenderá a sus hijas y la posición de su familia hasta el final de sus días.
Dirige los ejércitos que cruzan el río y otorgan su conocimiento de la zona.
El señor de los bosques
Tras el norte ningún otro reino es tan boscoso como la Tormenta. Sus caballeros y señores están acostumbrados a combatir bajo robles, hayas, abetos y coníferas. Sin mencionar la poderosa fuente de recursos que estos suponen.
Materiales para el cruce del río y habilidades del uso de bosquejos para ocultar sus movimientos.
Atalayas de las Marcas
El señor de Bastión es el encargado de la defensa de las Marcas de Dorne. A lo largo de la cadena montañosa no solo destacan los castillos de las casas Dondarrion o Caron, también una serie de construcciones que van desde el Torreón Cosecha hasta simples almenas que sirven para alertar sobre incursiones dornienses y facilitan la vida a los mensajeros y a los ejércitos que marchan por las Marcas.
La vigilancia de estos asentamientos está al cargo de caballeros errantes que han abandonado los caminos, de pequeñas aldeas o grupos de pastores. Los más conocidos son:
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Ser Lyle Selmy
Conocido por su destreza con la espada y la lanza, es un apasionado de los torneos, algo no muy común en la zona, donde los desprecian por parecerse muy poco a la guerra real, sobre todo en las Marcas.
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Denys el Tuerto
Jefe de una pequeña aldea de las marcas. Se ganó el respeto y su posición demostrando más valor que nadie que haya conocido. Ese mismo valor es el que le llevó a perder un ojo en una competición absurda con arcos y manzanas que ganó.
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Geron el Caballero
Un pastor de las Marcas que vive solo en las montañas. Su sobrenombre proviene de las historias que suele inventar y de su sueño de convertirse en caballero. Mientras tanto se gana el sueldo pastoreando varios rebaños de unas cuantas aldeas y manteniendo algunas de las almenas de mayor altura.
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Ser Lothar Gower
Un caballero más dado a la comida y a la bebida que al combate.
Comandan los ejércitos y otorgan su conocimiento de la zona.
Ejércitos
EJÉRCITOS QUE CRUZAN EL RÍO - GRUPO ORO
- 1 de Bosqueumbrío (Alzado) , en Remontando el Wyll grupo ORO [Numeroso –1, Leva, Hda +1, Caballeros +2, Arqueros +1, Veterano +1, Exploradores] FUE: 10.12
- 1 de Gallowsgrey (Alzado) , en Remontando el Wyll grupo ORO [Numeroso –1, Leva, Hda +1, Caballeros +2, Arqueros +1, Veterano +1, Exploradores] FUE: 10.12
Objetivo
- Cruzar entre 1/2 y 1 hexágono de montañas.
- Cruzar el río.
- Emboscar las tropas al otro lado del vado.
Misión
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Atravesar montañas no será fácil. Los exploradores y veteranos ya en atravesar las montañas de Nido de Cuervo volverán a hacerlo una vez más. Los caballeros de las Atalayas conocen la zona, así como Ser Desmond Caron, que conoce las Marcas. Los bosquejos serán vitales para ocultarnos de posibles exploradores enemigos y patrullas.
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Para cruzar el río será vital también usar a los caballeros de la zona, buscar un punto oportuno con buena corriente y utilizar materiales de los bosques para preparar un cruce. Un buen nadador que cruce para atar unas cuerdas al otro lado y preparando 3 o 4 pequeñas barcazas para cruzar los hombres, sujetos bien a estas cuerdas. Con los viajes que hagan falta. Lo importante es aquí que crucen primero los mejores exploradores y poder matar a cualquiera que nos vea. La viabilidad radica en conseguir encontrar un punto lo suficientemente poco profundo y con poca corriente para que puedan cruzar los 200 caballos que tenemos.
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Si se consiguen los dos primeros objetivos llegamos a lo importante, emboscar a los enemigos con los dos ejércitos que buscamos cruzar. Ocultarnos hasta el último momento, utilizar a nuestros caballeros marqueños y confiar en nuestras tropas veteranas y nutridas de exploradores.
Localización
MOVIMIENTO EJÉRCITOS
Desde Vado de Wyll hasta Lugar de la emboscada
Un ejército de tamaño 2 necesita un día para ir desde Vado de Wyll hasta Lugar de la emboscada
- 1 hexágono de difícil (bosque, colinas, pantano …), a marcha muy lenta, cruzando un río, en 24 horas
- Utilizamos una velocidad muy lenta, pues es una misión delicada que debe ejecutarse con cuidado.
MOVIMIENTO SER DESMOND CARON Y SU PEQUEÑO GRUPO
Desde Canto Nocturno hasta Cruce del río
Un pequeño grupo necesita un día para ir desde Canto Nocturno hasta Cruce del río
- 3 hexágonos de muy difícil (montañas), a marcha normal en 27 horas
- 2/3 de la marcha es sobre propias tierras de Canto Nocturno, Ser Desmond y un pequeño grupo para apoyar a su cuñado, además preveemos no encontrar resistencia militar hasta llegado el punto de cruce.
Roleo
Ser Robin Tormenta era completamente ajeno a la muerte de su primo, a la muerte de su héroe. Él estaba centrado en cumplir su misión, encontrarse con Ser Desmond y ponerse a su servicio.
Debía de comandar la vanguardia, un grupo de jinetes de las tierras de los Trant y los Mertyns con los que se había hecho rápidamente. Echaba en falta a Ser Byrion, pero era agradable no recibir órdenes de nadie. Era cierto que los señores de Gallowsgrey y de Bosqueumbrío no eran fáciles de llevar, pero las órdenes de Lord Borros habían sido claras y sobre todo, ayudaba el estar avanzando por aquel paisaje coronado por crestas agrestes y desnudas. Un lugar sombrío que pertenecía a los dornienses, unas gentes que formaban siempre parte de las pesadillas y los cuentos de viejas que las nanas de la Tormenta contaban a sus niños.
Afortunadamente, él no era muy dado a creer ninguna historia fuera de lo común. Claro que tenía miedo, como cualquier guerrero capaz que supiera lo peligroso que es avanzar en territorio enemigo sin una ayuda adecuada. Él se había rodeado de los mejores, Ser Lyle, Denys el Tuerto, Geron y su galantería, junto a Ser Lothar, habían engordado su compañía y alegraban el ambiente con sus chanzas y su conocimiento despreocupado de aquellas tierras.
Mientras esperaban la llegada del señor de Canto Nocturno, que había que tenido que dejar a sus tropas atrás, talaron los suficientes árboles y encordaron las suficientes cuerdas para cruzar el río. Le ponía nervioso el primer día, donde se decidiría la viabilidad de aquella locura. Cruzarían dos decenas de hombres, sin caballos, que debían de asegurar la zona y vigilar la seguridad de la ruta. Tras ellos cruzarían dos docenas de caballos, el río tenía poca fuerza y la profundidad era necesaria salvarla con barcazas para los hombres, pero un caballo podría cruzarlo con la suficiente calma. Si todo salía bien.