Misión 33: La Casa Frey

POV

Tywin Lannister

Tokens

Tywin Lannister. La Corona.

Tropas

Ninguna

Misión

Asegurarse la lealtad de Toro. Que este le sea leal a Tywin por encima de todo lo demás y conseguirlo como Token.

Roleo

La falta de respuesta de la casa Frey y de Rose Reed era preocupante. Tywin Lannister no acababa de entender como se había producido aquella traición, si finalmente se llegaba a producir.

<<No tiene sentido esperar más para aclarar algunas cosas>> Pensó.

Terminó de leer el pergamino y lo dejó a su izquierda, junto a otros de una índole similar.

— Toro— Llamó. —

Al momento el hombretón apareció. — ¿Si, majestad?

— Ven, quiero hablar contigo.

El guardaespaldas entró y se puso firme, esperando a que el Rey le encargase alguna misión. Lo que dijo a continuación, lo dejó un poco descolocado.

— Siéntate. Pero antes ponme una copa de vino y ponte otra para ti.

El guerrero obedeció suspicaz. Tywin no lo trataba mal, al contrario, pero de ahí a que bebieran juntos había un trecho…

— ¿Cuanto hace que eres mi guardaespaldas, Toro?
— No… No lo recuerdo, señor, Majestad. Mucho tiempo, pero no se… no se el tiempo exacto.— El hombre estaba nervioso, parecía convencido de que iban a culparlo de algo.
— Mucho tiempo, es cierto.— Confirmó el propio rey. — ¿Tienes alguna queja hasta el momento?
— No, majestad. Ninguna.— Respondió el otro sin dudar. — Si vos…— pareció que iba a seguir hablando, pero calló ante un gesto del monarca.
— Yo estoy muy contento con tu servicio, Toro. Y me gustaría que siguiera siendo así durante muchos años. Hasta que tú quieras dejarlo o pueda darte un puesto más acorde.
— Gracias señor. Majestad.
— Así, pues, Toro. ¿Cuento con tu lealtad? ¿Pase lo que pase?
— Sí, Majestad. Hasta la muerte.
— Se acercan tiempos turbulentos, las lealtades serán puestas a prueba, quizá nos veamos obligados entre la familia y el deber. Si se diera el caso en que la Casa Frey se rebelase contra mi, Toro… ¿de qué lado te pondrías?

El rey aguardó la respuesta. Estaba casi convencido de cual iba a ser está, pero nunca estaba de más de ser, al igual que el propio Toro al principio, suspicaz.

El toro os jura fidelidad, sois vuestro rey hoy y siempre. Solo os pide que nunca le pidáis matar a alguien de su sangre, no desea ir a los Siete Infiernos.