PoV
Larys Strong
Larys padeció de un pie equinovaro durante toda su vida, el cual arrastraba cojeando. Larys es un hombre reservado, pero amable cuando le es necesario. Raramente habla en las reuniones del Consejo Privado, prefiriendo siempre escuchar. Sin embargo, cuando habla, lo hace con elocuencia, compartiendo palabras de gran importancia. Como Consejero es enigmático y astuto. Larys es una persona asustada y su miedo proviene de los dragones; por extensión, cree que los Targaryen son lo que mantiene a los dragones en Poniente y, por ello, deben caer para que caigan las bestias. En realida da Larys el orden de quien cae antes no le importa, siempre que desaparezcan tanto los dragones reales como aquellos que los llevan como emblema.
Tokens
Señor de Harrenhal
Incluso no teniendo la grandiosidad de antaño, Harrenhal es una fortaleza única en Poniente y su señorío no es nada desdeñable, proporcionando unas rentas que convierten a los Strong en unos señores poderosos.
El pago de Sangre proviene de las arcas personales de Larys, no se puesto como Consejero de Rumores.
Sangre y Queso
Larys tiene a mano asesinos a sueldo que no hacen preguntas y carecen de cualquier atisbo de moral.
Sangre será el encargado de matar al aprendiz de maestre.
Ejércitos
No
Objetivo
Recuperar el token de Conspiración de la Ciudadela.
Misión
Larys moverá algunos hilos y tirará de influencia para que el aprendiz de Maestre que se vio implicado en el robo de la corona y la espada tenga una jubilación anticipada. Siendo como es Lord Confesor habrá sido el encargado de interrogarlo, por lo que puede elaborar un informe en el que se dictamine que fue engañado por alguien desconocido - y que Larys encontrará, claro - y que el aprendiz, obviamente, debe volver a la Ciudadela. Nunca llegará, obviamente, Sangre lo esperará en alguna posada donde tenga que parar para descansar y allí le dará matarile y se deshará del cuerpo.
Localización
Desembarco y alrededores
Roleo
Una vez le oyó decir a un maestre que un cuerpo humano pierde una onza cuando muere y que ese sería el peso que tendría la vida. Larys tomó una dragón de oro y lo sopesó en su mano.
– Tres dragones.
Sangre alargó la mano y recogió tres monedas del montón que había en la mesa. El Consejero de Rumores nunca pagaba directamente sino que permitía que aquellos que estaban a su servicio cobraran su precio por su propia mano.
Una vez el asesino se hubo marchado, Lord Strong comenzó a anotar unas líneas en su diario.
… dragones para acabar con dragones, qué irónica se puede volver la vida en ocasiones …