Tywin Lannister
Tokens:
Inteligencia y astucia
Minas de Roca Casterly
Misión:
Antes de marchar con sus ejércitos y visitar castillos Lord Tywin va a preparar un plan B a la batalla de Colmillo Dorado. Los Tully defienden posiciones y el cerco está siendo difícil de romper. Pero quizá haya una manera. En su mente un plan está orquestándose y su nombre y su riqueza todavía pueden hacerlo viable.
Mandara a alguno de sus guardias de confianza, a cualquier puñado de hombres que sigan a Tywin para entrar en las tierras de Aguasdulces desde Salón del Viento. Como campesinos.
La idea es sencilla, encontrar familias que hayan servido en el castillo de Aguasdulces. Como guardias, como aguaderos, como panaderos o como herreros. Cualquier cosa.
Los campesinos son fieles seguidores de los Tully por eso no será fácil. El premio es mucho oro, una parte tras obtener la información y otra tras ejecutarse su plan y comprobar que la información es fidedigna. Evidentemente no podemos correr el riesgo de que se sepa nada; así que, estos hombres, vestidos de campesinos refugiados, una vez susurren las palabras a los oídos que les hayan dado cobijo, mataran a cualquiera que rechace el trato. Si aceptan nos quedamos con ellos hasta la llegada de los refuerzos.
Objetivo:
Encontrar servidores o exservidores del castillo de Aguasdulces que conozca sus cambios de guardia o cualquier debilidad en las defensas, patrullas, etc.
Misión de preparación de una misión contra el castillo de Aguasdulces.
Roleo:
Cejos, Orejamocha y Lum empacaron sus enseres tras dormir al raso en una de las últimos estribaciones de las montañas bajo la vigilancia de los Estren. De ahora en adelante caminarían por las tierras de los Tully, siguiendo la corriente del Piedra Caída, cada día acercándose más a Aguasdulces.
Habían dejado todo lo que los relacionase con los Lannister atrás. Llevaban una pequeña mula y equipaje como para parecer dos hermanos desplazados por la guerra. Se aprovecharían de la bondad de los campesinos. Una vez sentados en su casa y comiendo su comida pronunciarían las palabras. Una vez encontrado el hombre o mujer necesario le harían la propuesta. Más oro del que habrían visto jamás. A cambio solo tendrían que irse con ellos, ayudar a su señor en lo que requiriese y volver a su vida, ricos y a salvo. De lo contrario matarían a todos e incendiarían la casa para calcinar sus cadáveres y que nadie pudiera distinguirlo de un incendio normal y corriente.