POV:
Tyrion Lannister
Tokens:
- Bronn: Mercenario al servicio de Tyrion Lannister, nuestra promesa es siempre superar la mejor oferta que le hagan. Hábil guerrero de una sola espada, sus reflejos y una mano libre para usar una daga que ha salvado su vida en contables ocasiones. Hombre pragmático y sin escrúpulos, su especialidad es la de sobrevivir y ganar, a costa de todo lo demás.
Objetivo:
Tener el control de la información del Bosque Real. Conocer lo que ocurre dentro de él y en sus aledaños.
Misión:
Bronn cruza el Aguasnegras con el ejército de salvajes de Tyrion.
- 1 de Salvajes de Tyrion (Alzado), en Desembarco del Rey grupo NEGRO [Veterano +1, Armadura –1, Arqueros +1, Salvajes] FUE: 13
Se adentrará en el bosque y avanzarán por fuera de los caminos, acercándose y alejándose del camino principal para no ser detectados. El ejército disperso, para llamar menos la atención. 50 grupos de 20 repartidos a varias millas de distancia. Su objetivo debe ser mirar, contar, si pueden matar unos pocos y retroceder. Vida salvaje de siempre, a eso deben estar acostumbrados. Bronn al mando, con los grupos de vanguardia, esperando que le primer contacto con enemigos sea en el grupo que él comande.
El resto deben limitarse a buscar otros espías y no dejar a nadie vivo que los hubiera visto.
Finalmente, y antes de volver, ascender a las montañas que separan el Bosque Real y Bastión de Tormentas. El ascenso puede realziase solo con un puñado de hombres, mientras el resto aseguran su posición en el Bosque antes de emprender el regreso. Puede que desde allí tengamos una mejor visión del ejército de Renly y si ha emprendido la marcha, hacia donde.
Roleo:
Una pareja de mercaderes reposaba cerca del nacimiento del río. Parecían haberse percatado de la presencia de ojos entre el follaje del bosque. Habían marchado durante días, durmiendo en las copas de los árboles, en cuevas y en viejos refugios de cazadores. Hasta el momento era el primer grupo de personas que encontraban, Bronn estaba preocupado. Si no veían a nadie quizás es porque los que estaban siendo observados eran ellos. A veces odio este maldito trabajo, pensó justo antes de saltar hacia el claro del bosque y ensartar a él con la espada y degollar a ella con la daga.
Bien, el límite del bosque se encuentra cerca, pronto comenzará el ascenso -se volteó para buscar al salvaje-. ¡Shagga, conmigo!