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Eirunn, la Senescal de Nathul alcanza Alba Julia, habla con Tirso

Acuerdo entre Nathul y Lorelan.

Los fiska de Nathul otorgarán suministros y mano de obra para la reconstrucción de Alba Julia. También guardarán la orilla izquierda del Storáa (y por ende Alba Julia) de invasores de otras tribus, en cuya defensa nos comprometemos a ayudar.

El siguiente token:

Oro de Aricia II , multitud de cofres de oro obtenidos de la explotación de los yacimientos minerales de la cordillera del Lunn, al sur de Aricia, en la frontera con la provincia de Latmus. De aquí se extrae principalmente hierro, cobre, mármol y plata en gran cantidad.

Está empleado en la misión II, pero vaya, considéralo a partir de ahora en “alquiler” para Nathul. Mientras sigan llegando las caravanas con recursos y mano de obra, dispondrán de él.

Detectas hombres de Rivendall al este de Ingridsdottir, cerca de Olafsson ( la de Rivendall), unos 1500 marchando hacia el oeste.

En Alba Julia llegan varios emisarios de Nathul, acompañados por 500 hombres. Dicn que vienen a entrenar en las formas de guerra de los Lorelanos, si es así, poned (quien sea) mision al respecto

Y añadido, te llegan noticias desde más allá del Kaven, los hombrs de Snjórsonr se reunen en las proximidades de Valdisjar, aunque no se saben de sus intenciones.

10000 hombres, mejor armados que la mayoría de los Fiska, por lo que sabes de los Járnvaki (sus fuerzas de élite) podrían medirse de tú a tu con las legiones, pero de esos solo hay 1500, el resto están bien armados pero no son tan fuertes como las legiones.

Las noticias vienen firmadas por los Skjaldar, que dicen no marcharan contra Lorelan, pero defenderan sus tierras si se vieran atacados. Piden a Lorelan que se queden al oeste del río Kaven.

Lo pongo por aquí, que no me da tiempo a desarrollar en diplomacia. Quizá mañana, será largo, porque lo merece.

Acuerdo entre Rivendall y Lorelan, cese de hostilidades. Rivendall reconoce la autoridad del Emperador y el Senado. Runa se puede llevar a Signe Rivendall (hermana del jarl) de vuelta.

Actualizaciones diplomáticas.

Rivendal nos informa que Snjorsonr ha cruzado el Oeste del Kaven. Es la guerra. Parece que marcha confiado hacia nosotros: no puede salir vivo de aquí. Tiene que ser aniquilado, pero sin que nosotros tengamos excesivas pérdidas en el proceso.

Por ello, se le van a dar condiciones muy generosas a Kaven para que colabore en el exterminio de Sñordor. Sus 3000-4000 hombres pueden ser un peso numérico determinante ahora, y además pueden tomar su retaguardia. En principio están con nosotros.

Con los 2500 de Nathul, otros 2500 de Rivendal y los 8000 nuestros no veo cómo puede Snjorsonr salir vivo. Tenemos mejor posición y mejores líderes. Hay que aprovecharlo.

Por otra parte, Porsenna ya está viendo como empiezan a maniobrar los aliados fiska, sospecha que aunque consiga su “rendición” formal van a usarle siempre que pueda como arma de choque para diezmar sus legiones y en cuanto esté lo suficientemente diezmado, quitárselo de encima.

Es hombre pragmático que sabe escuchar el duro lenguaje que la razón le dicta. RENUNCIA a conquistar toda la isla. Si el Senado quiere eso, que mande más legiones. Es imposible hacerlo con sólo dos, inferioridad numérica de 10:1 (aprox, si consideramos Lorelan vs nativos) y capacidad de los fiska para organizarse en coaliciones. Tras la guerra contra Snjorsonr conquistará a Bjorn y a Hesthjartha y se limitará ya a asentarse firmemente, aprovechando los sucesos locales y armas sutiles como la fe de Loric, la civilización y jugando con las ambiciones personales de cada uno.

1500 hombres de Nathul alcanzan Alba Julia, entiendo que les das cobijo, pero avisa si no.

Sois muchos, demasiados, no cabéis todos en la ciudad. Caben 20 ejércitos en Alba Julia. Si te cuadras un esquema con la ciudad, el campamento y el puente todo más fácil!

Desde el otro lado del río llegan noticias, los Snjórsonr avanzan hacia la desembocadura. No sabes nada de hombres de otras facciones.

Ahí el esquema.

Damos cobijo a los hombres de Nathul, cómo no. Pero partimos en nada.