Al llegar a ciudad se instalaron en una taberna pulcra, pero no demasiado cara, no querían llamar la atencion, aun estando entre amigos.
Andros debía reunirse con el señor, Allyria y los chicos se quedarían en la taberna. a ninguno de ellos le gustaba la idea de quedarse allí encerrados, tenian ante ellos una ciudad sumamente interesante de explorar. Michael, el mayor era el que más se quejaba, aunque los demás estaban igualmente como truchas en una barrica. Charles y Larry echaban pulsos, Karl y Scott apodado Scottie se jugaban unas habichuelas secas a las cartas.
A la mañana siguiente de su llega a desembarco, Andros se acicaló, eligió a Michel como acompañante y se dirigieron a la dirección que se les había dado. llevaban el ánimo tranquilo, el viaje no había tenido percances y todo parecía ir viendo en popa.
Andros retornó al anochecer, mucho más tarde de lo que habíamos pensado. No traía buena cara y Michel que no sabía porque, no paraba de pedirle que se explicara. Fue Allyria quien les dijo lo que querían saber aunque no estuvieran preparados para escuchar.
-Andros está preocupado porque vamos a hacer algo grandioso y peligroso. Ha jurado acompañarme. Pero me da igual si viene o no, yo voy a hacerlo. El que no tenga pelotas para venir conmigo, puede irse a tomar por culo. No os necesito y no soy estúpida, es demasiado peligroso para que nadie quiera acompañarme.
Hicisteis juramento, pero para mi no son importantes, los hicisteis sin saber a que os arriesgabais en realidad. No os voy a explicar los detalles y puede que una vez esté allí no volváis a verme. Pero sabed que muchos me han jodido en esta vida, de múltiples maneras y no hablo metafóricamente, aunque también.
Nunca he tenido poder para vengarme de quienes me dañaron, quienes me insultaron, quienes me vendieron ni me compraron. Pero si nos volvemos a ver cuando termine lo que tengo que hacer, recordare a los que habeis estado conmigo.
No tengo más que mi palabra, no tengo más que mi vida para comprar lo que quiero, pero a diferencia de muchos hombres, yo, que no tengo huevos fisicamemte hablando, metafóricamente tengo cicatrices en las ingles del roce de los enormes huevos que tengo. ¿Tenéis alguna puta pregunta más o nos vamos ya?
Andros miró con ira a la mujer, no con odio, pero estaba furioso. ¿En que se había metido?
-Yo solo tengo una palabra y ya la he prometido. Voy contigo. Victoria o muerte, las cicatrices de mis ingles son iguales o más gruesas que las tuyas. Pues nadie tiene los huevos más gordos que yo en esta puta habitación.
Los ánimos se caldeaban, Andros y Allyria no se echarían atras ¿Pero y los otros 5? Fue Scottie el que terminó de decantar la balanza. Bajándose los pantalones empezó a gritar.
-No me dejareis atrás. ¡Mirad que gordos tengo los huevos!
En cuestión de minutos. Los 5 muchachos se habían bajado los pantalones y debatían sobre quien los tenía más gordos. Andros se debatía entre bajarse los pantalones o darles de hostias. Fue Allyria quien terminó con el asunto.
-Ninguno me habéis impresionado. Y he sido puta toda mi vida, se de huevos gordos y de huevos enanos. Y se lo que es reírse de un gran Lord cuyos genitales no hacían justicia a su título. Y se lo que es que te peguen mientras ríes, porque pueden quitártelo todo, pero cuando ya lo han hecho, eres indestructible. Cuando volvamos, nuestros nombres quedarán grabados en la historia. todos sabrán quienes son Andros Lannet y yo misma. ¡Todos conoceran Jordan, Larry Bird, Charles Barkley, Karl Malone y al pequeño Scottie Pippen de los putos huevos gordos!