PoV
Lady Mallora Hightower
Token
Lady Malora
Un saber desmedido
Misión
Creación de un “lobby” proAntigua en Tyrosh
Roleo
edito en que lo tenga
Objetivo
Ganar el apoyo del Arconte para favorecer a Antigua o el del mayor número de magister posibles
Ruta + Tiempos de movimiento
Cruzará 31 hexágonos de mar abierto en 155 horas navegando normalmente
Paradas
Avísame el miércoles 24/10
Aquí falla algo. El token el Oro de Lord Leyton es el mismo que Leyton el dorado, no puedes usar 2 tokens a la vez en la misma misión. Y en caso de poder utilizarlo estaría Dañado, pero solo podrás usarlo a partir del 1 del 11. El resto están bien usados.
Tímidamente consigues iniciar las negociaciones con los magisters, Lady Malora queda retrasada en esta misión hasta que consigas algo más patente.
Te volveré a decir algo el día 30/10
Si quieres un +1 que facilite las cosas hazme un roleito con la forma en la que quieres conseguir ese “lobby” y para obtener qué.
Lady Malora se alisó la falda de su vestido mientras, sentada en aquel frío banco de mármol blanco, esperaba a ser llamada por los magisteres de Tyrosh. Estos se reunían en la Torre Sangrante, uno de los mayores y más imponentes edificios de la antigua colonia valirya. Su piedra era roja como los rubís y debido al agua que se pegaba a la fachada que daba al mar por culpa del oleaje parecía que la torre sangraba. Malora había conseguido entrar, había conseguido llegar hasta allí y todo simplemente con decir quién era. Ser familia del famoso Leyton el dorado abría muchas puertas pensó la mujer sonriendo para si con la cabeza gacha mientras esperaba a ser llamada, con un aura de bondad y calma que no le pegaba nada.
Los cuatro caballeros que la acompañaban estaban tensos y serios, aquel no era lugar para cometer errores. Por eso cuando las grandes puertas del parlamento tyroshi se abrieron chirriando y rompiendo el silencio los cuatro fornidos hombres se giraron hacia allí de inmediato haciendo resonar sus armaduras y provocando un breve estruendo. Malora alzó la cabeza disgustada, había disfrutado del silencio. – Lady Malora Hightower, el Arconte y los magísteres os recibirán ahora – dijo un viejo y enjuto ayuda de cámara con el pelo de vivos colores, tradición entre los hombres del lugar.
Malora se levantó con parsimonia, la habían hecho esperar y no pensaba correr. Se alisó la falda y empezó a caminar hacia la puerta deteniéndose solo cuando sus hombres la imitaron – no, voy yo sola mis señores – dijo volviendo a andar sin esperar una respuesta por parte de los hombres, dejándolos ahí plantados mientras veían como las puertas se cerraban tras ellos.
En el interior, colocados en una grada en forma de media luna partida por un alto asiento de caoba esperaban a Lady Malora todos los prohombres de la ciudad, hablando entre ellos al verla llegar y provocando murmullos que tuvieron que ser callados a golpes con un bastón en el suelo por otro ayudante. Poco a poco se hizo el silencio y el arconte, sentado en su trono, observó con detenimiento a Malora, fijando su mirada en los ojos de ella y sorprendiéndose cuando la mujer, en vez de amilanarse lo miraba desafiante. – Está ante nosotros Lady Malora, hija de Lord Leyton Hightower, señor de Antigua. ¿Qué os ha hecho venir hasta aquí a pedir audiencia de esta noble cámara Lady Malora? – dijo el arconte antes de volver a reclinarse en su cómodo asiento para escuchar a la mujer.
Malora hizo una reverencia como mandaba el protocolo y cruzó las manos a su espalda nada más estuvo frente al arconte, observando como su rostro desafiante mostraba signos de debilidad. Quizás la edad o quizás no saber qué hacía allí, igual daba. – Ilustres magísteres de Tyrosh, grandes hombres todos vosotros. Estoy segura que al igual que en Antigua se siguen con preocupación fraternal todos los problemas que suceden en la querida Tyrosh, en Tyrosh, se siguen con la misma preocupación los asuntos de Poniente – dijo para empezar, girándose entonces hacía su derecha, hacía donde estaba gran parte de uno de los bandos de Tyrosh – pronto los Siete Reinos serán asolados una vez más por la guerra, es inevitable, es incluso necesarias para aliviar tensiones. Pero es mala para el comercio – dijo alzando su índice derecho al decir lo último – y en Antigua, al igual que en Tyrosh, no nos interesa que nuestro fructífero comercio decaiga por una guerra que tampoco nos interesa en exceso – dijo haciendo una breve pausa para girarse ligeramente hacia su izquierda, tal y como había hecho antes hacía el lado contrario. – Además, Antigua siempre ha recordado a sus amigos mis ilustres magísteres. Todos codiciamos algo, todos ansiamos algo y si Tyrosh, como buena amiga, ayuda a Antigua y a sus intereses durante la guerra que habrá en Poniente, Antigua y quizás el Trono de Hierro después apoyarán a Tyrosh en sus pretensiones expansionistas – tal y como había ensayado dejo que el murmullo volviese a hacerse con la sala durante unos segundos antes de carraspear la garganta para hacerlos callar. – Y eso no es todo, mi padre me ha asegurado que si Tyrosh ayuda a Antigua dispondrá de preferencia en el comercio, los mejores puestos, menos tiempo de espera en el atraque y descarga de los navíos y todos esos asuntos que ustedes conocen mejor que yo. En Antigua no olvidamos, recordamos a nuestros amigos, y queremos que Tyrosh sea un gran amigo en el futuro ¿Qué respondéis mis señores? – terminó Lady Malora, soltando el poco aire que esperaba en sus pulmones, mirando de nuevo al arconte y esperando con la pose perfecta de una dama.
Obviamente me he tomado grandes licencias al no saber demasiado sobre Tyrosh, espero no te importe
Es dia 30!ajajaja no se si tendras tiempo pero por si acaso…
Vaya así, es. Leo y resuelvo.
Nada tuvieron que objetar, te ayudarán en todo lo que puedan, no tienen nada que perder. Su ciudad tiene para ofrecerte, dinero con el que pagarán gustosos aquello que queráis venderle, mercenarios que podéis pagar con ese mismo dinero, y otros muchos serivicios que se os proporcionarán.
(Para futuras misiones en Tyrosh donde quieras obtener algo palpable obtendrás un bonificador.
